El caso es que de vez en cuando en cualquier momento del día me digo a mi misma "ay voy a escribir de esto en el blog".
Lo dificil es encontrar el huequito para ponerme a escribir.
El lunes fue mi cumple 32 y mi santo y el de mi nombre. Y el día en que mucha gente en suiza empieza las vacaciones. Otros años lo he celbrado con amigas pero este año llegamos de Madrid un viernes, teniamos planes para el fin de semana y entre que todo el mundo esta fuera, o super embarazados a punto de explotar o con un bebe muy chiquitin o lo que sea el caso es que este año mi cumple fue solo mío.
Bueno digamos que ha sido un cumple de "a dos", por el día con mi chiquitina que yo la decía "es mi cumple" y ella repetía "mío" señalandose a si misma.
Y por la noche...ayyy que noche tan tan bonita me esperaba. Tenía cita con mi chico. Esto suena de lo mas normal cuando no tienes niños verdad? pero cuando tienes y son pequeños suena a lujo. La primera vez desde enero que salimos a cenar solos. Al arreglarme tenía esa sensación que tienen los enamorados en las primeras citas!
Me llevó a cenar a un restaurante en las alturas de Zürich, todo se veía muy bien desde ahí arriba, la comida exquisita. Mis regalitos también me gustaron, entradas para el teatro y para el cine y un movil nuevo....si he abandonado la edad de piedra y estoy desbordada con tanta tecnologia. Pero lo que mas me gustó , lo que me hizo llorar fue una carta escrita a mano, de esas que nos hacen mucho bien en el sentido mas amplio. De las que te enamoran.
Mi amiga Christine ademas de cuidarme a la peque (que ya es un regalazo) me regaló un libro y este cupcake tan especial, al verlo la dije "este no me lo como" y es que es para darse un baño!
Bolitas de yuca.
Fuente : El arte de la cocina peruana.
Ingredientes
500gr de yuca (mandioca)
harina
aceite vegetal para freir
sal al gusto
Lavar bien y pelar las yucas. Cortar en trozos y colocar en olla grande con agua fría salada, cocinar hasta que esten muy suaves.
Escurrir bien y fijarnos que no ha quedado ninguna vena dura.
Pasar por pasapures.
Salar.
Con las manos enharinadas formamos bolitas. En una sartén onda con aceite caliente las vamos dorando.
Se puede introducir dentro de las bolitas un trocito de queso mozzarella o queso para fundir al hacer las bolitas. (las mías tienen)
Lo dificil es encontrar el huequito para ponerme a escribir.
El lunes fue mi cumple 32 y mi santo y el de mi nombre. Y el día en que mucha gente en suiza empieza las vacaciones. Otros años lo he celbrado con amigas pero este año llegamos de Madrid un viernes, teniamos planes para el fin de semana y entre que todo el mundo esta fuera, o super embarazados a punto de explotar o con un bebe muy chiquitin o lo que sea el caso es que este año mi cumple fue solo mío.
Bueno digamos que ha sido un cumple de "a dos", por el día con mi chiquitina que yo la decía "es mi cumple" y ella repetía "mío" señalandose a si misma.
Y por la noche...ayyy que noche tan tan bonita me esperaba. Tenía cita con mi chico. Esto suena de lo mas normal cuando no tienes niños verdad? pero cuando tienes y son pequeños suena a lujo. La primera vez desde enero que salimos a cenar solos. Al arreglarme tenía esa sensación que tienen los enamorados en las primeras citas!
Me llevó a cenar a un restaurante en las alturas de Zürich, todo se veía muy bien desde ahí arriba, la comida exquisita. Mis regalitos también me gustaron, entradas para el teatro y para el cine y un movil nuevo....si he abandonado la edad de piedra y estoy desbordada con tanta tecnologia. Pero lo que mas me gustó , lo que me hizo llorar fue una carta escrita a mano, de esas que nos hacen mucho bien en el sentido mas amplio. De las que te enamoran.
Mi amiga Christine ademas de cuidarme a la peque (que ya es un regalazo) me regaló un libro y este cupcake tan especial, al verlo la dije "este no me lo como" y es que es para darse un baño!
Bolitas de yuca.
Fuente : El arte de la cocina peruana.
Ingredientes
500gr de yuca (mandioca)
harina
aceite vegetal para freir
sal al gusto
Lavar bien y pelar las yucas. Cortar en trozos y colocar en olla grande con agua fría salada, cocinar hasta que esten muy suaves.
Escurrir bien y fijarnos que no ha quedado ninguna vena dura.
Pasar por pasapures.
Salar.
Con las manos enharinadas formamos bolitas. En una sartén onda con aceite caliente las vamos dorando.
Se puede introducir dentro de las bolitas un trocito de queso mozzarella o queso para fundir al hacer las bolitas. (las mías tienen)